Iván Reyes Arzate, ex policía federal y ex comandante de la Unidad de Investigaciones Especiales, además de colaborador cercano de Genaro García Luna, fue condenado ayer a 10 años de prisión por delitos de narcotráfico y corrupción.
La condena “del cercano de García Luna” fue dada ante un tribunal federal en Nueva York, donde también se aseguró que no será testigo cooperante en otros casos pendientes en Estados Unidos.
En una audiencia ante el juez federal Brian Cogan, del tribunal del distrito este de Nueva York en Brooklyn, Reyes Arzate recibió la condena recomendada por los fiscales.
Aunque serán ocho a partir de hoy, ya que fueron incluidos los dos años que ya cumplió encarcelado desde que fue arrestado por los cargos de conspiración de trafico internacional de cocaína.
El llamado “La Reina”, no será testigo cooperante en otros juicios.
Sufre “abusos” en la cárcel
Durante la audiencia, Reyes Arzate se quejó de que lo agreden en la prisión por filtraciones en los medios de que es testigo colaborador.
El fiscal federal Breon Peace declaró al conocerse la condena que “oficiales de policía corruptos que usan sus puestos gubernamentales para promover los intereses de los cárteles de droga serán llevados ante la justicia y castigados por sus delitos”.
El jefe de la DEA en Nueva York, Timothy Foley, señaló que:
“Los delitos de Reyes Arzate son una afrenta a las autoridades de seguridad pública, especialmente aquellas que trabajan para evitar que las drogas ilícitas lleguen a las calles de Estados Unidos”.
Reyes Arzate estaba a cuatro días de concluir una condena dictada en enero de 2020 por cargos en Illinois, pero fue arrestado de nuevo por las acusaciones federales en Nueva York, a las cuales se refiere la sentencia de ayer.
El ex mando de la Policía Federal (PF) se declaró culpable de los cargos de conspiración para la distribución internacional de cocaína formulados en Nueva York en octubre de 2021.
Se cree que en su calidad de comandante de la Unidad de Investigaciones Especiales se reunió con jefes de El Seguimiento 39 y aceptó un soborno de 290 mil dólares.
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