¿Sabías que tu consumo de ropa afecta al planeta debido a que su producción y su comercialización no son sustentables?.
A través de un comunicado, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) alerta sobre este problema. El cual, basándose en información de la organización ambientalista internacional Greenpeace, puntualiza que la contaminación que genera la producción de ropa es de 500 mil toneladas de microplásticos al año que llegan a los océanos.
Se estima que 73 por ciento de las prendas producidas termina incinerada o en basureros, produciendo la polución del suelo y aire.
“Parece que el deseo de consumo es infinito mientras que la realidad es que vivimos en un planeta que ya está alcanzando sus límites. Se están deteriorando los recursos naturales, además de consumir los de las próximas generaciones.”
Alertó el responsable del área de Consumo Sustentable en la Coordinación Universitaria para la Sustentabilidad (COUS) de la UNAM, David Sébastien Monachon.
“Algunas empresas de ropa aprovechan la credulidad de la gente y sus preocupaciones relacionadas con el cuidado del medio ambiente. Para lanzar campañas de comunicación y marketing que buscan generar mayor consumo y ganancias. Esto ocurre cuando las prendas tienen etiquetas relacionados con lo ‘verde’ o lo ‘ecológico’, sin tener un sustento real. A esto se le conoce como greenwashing, o sustentabilidad que se puso de moda y hace vender”.
La institución educativa mencionó el tema de las innovaciones como una curva que sube hasta que deja de ser novedoso y cae porque viene otra cosa innovadora. Ocurriendo algo similar en el mundo de la ropa: cuando el consumo baja, se crea nueva moda para impulsar un consumo sin fin.
“Las condiciones laborales de los trabajadores de la empresa que produce la prenda, pueden ser deplorables. Y la desinformación complica la tarea del consumidor para identificar cuáles son sus mejores opciones. Además, los procesos de fabricación no son libres de impactos sobre el ambiente. Por ejemplo, para teñir las prendas se gasta demasiada agua o se usan colorantes químicos dañinos que impactan al medio ambiente y a nuestra salud”.
Consumo responsable
De acuerdo con el comunicado de la UNAM, algunos estudios mercadológicos muestran que en la época decembrina se gastan hasta mil 448 pesos en ropa.
“Primero debemos reflexionar si es necesario comprar más prendas de vestir. En caso de que sí se consuma, revisar la calidad de los tejidos para cerciorarse que la prenda durará más tiempo. Y alejarse de los eslogan que pretenden vincular las formas de consumo con la identidad o la culpabilidad. Sentirse ‘cool’ o comprar ‘verde’ no es necesariamente sustentable”, sugirió David Monachon.
Para realizar un consumo responsable de estos materiales, es importante contar con información de cuál es su origen, procesos de fabricación y producción, y saber quiénes están detrás de esto.
“Para evitar más desperdicios y contaminación ambiental existen otras alternativas para darle un segundo uso a las prendas de vestir. Como llevarlas a tiendas comerciales que fomentan el reciclaje u optar por bazares donde se les da a las prendas una segunda oportunidad. Pero antes de todo, debemos reducir nuestro consumo y alejarse de las modas ‘yoyo’”, aconsejó el académico.
Por su parte la Organización de las Naciones Unidas (ONU) considera que la producción de la industria textil, es de las más dañinas y contaminantes para el medio ambiente. Ya que es responsable de 20 por ciento de las aguas residuales globales y 10 por ciento de las emisiones totales de carbono.
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