Shanghái ordena confinamiento y pruebas masivas de COVID para más de 1 millón de habitantes
Shanghái, ordenó realizar pruebas masivas de detección del coronavirus para los 1.3 millones de habitantes del distrito central de Yangpu.
Los cuales se quedarán en sus casas al menos hasta que se conozcan los resultados.
La medida recuerda a las tomadas durante el verano que derivaron en un confinamiento de dos meses en toda la ciudad que devastó la economía local y provocó desabastecimiento de alimentos.
Al principio, se dijo que el cierre duraría apenas unos días, pero luego se fue ampliando el plazo.
China no ha dado indicios de suavizar su restricción política de “cero COVID” desde el congreso del gobernante Partido Comunista que terminó esta semana otorgándole a Xi Jinping un tercer mandato de cinco años.
Las medidas contra la pandemia se extienden desde Shanghái a Tíbet, donde también se han informado protestas contra el confinamiento.
Imágenes mostraron una multitud tanto de tibetanos como de migrantes chinos de etnia han en las calles de Lhasa para protestar contra un confinamiento que dura 74 días.
Muchos chinos esperaban una suspensión del estricto protocolo contra el COVID-19, que sigue vigente mientras el resto del mundo ha regresado a la normalidad.
Las fronteras del país permanecerán su mayoría cerradas y los recién llegados deben pasar una cuarentena de 10 días en espacios designados para ello.
Beijing achaca a esta estrategia el haber controlado los contagios y decesos, que son una parte de los registrados en otras naciones aunque los datos chinos han sido cuestionados frecuentemente.
China reportó el viernes mil 337 nuevos positivos, en su mayoría asintomáticos, y ningún deceso.
En Shanghái se registraron 11 casos asintomáticos y Tíbet tenía un contagio con síntomas y cinco sin ellos.
Las autoridades chinas dicen que en el país se han registrado 258 mil 660 casos y 5 mil 226 muertes desde que se detectó por primera vez la pandemia en la ciudad de Wuhan, en el centro del país, a finales de 2019.
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