El líder indígena y prisionero político estadunidense Leonard Peltier se contagió de covid-19 a finales de la semana pasada.
El líder generó temores sobre su estado, multiplicando las demandas de defensores de derechos civiles y humanos de que Biden lo libere de la cárcel.
Peltier, se le considera como un prisionero político, y cuyo caso Amnistía Internacional señala que fue influido por intereses políticos.
Siempre ha mantenido su inocencia de que asesinó a dos agentes del FBI en 1975, durante un enfrentamiento en la reservación indígena de Pine Ridge.
Peltier, líder del Movimiento Indígena Americano, estaba presente y se supone que la FBI necesitaba responsabilizar a alguien por la muerte de sus agentes.
Sus defensores dicen que su juicio fue contaminado de problemas como falta de pruebas, manipulación y ocultamiento de documentos por los fiscales, coerción de testigos por la FBI e integrantes del jurado que aceptaron ser anti-indígenas.
Un fiscal del caso, James Reynolds, le envío una carta al presidente en la que habla de cómo se dio cuenta de que el juicio fue injusto y escribe:
“Le ruego conmutar la condena de un hombre que yo ayudé a poner tras las rejas”.
Figuras publicas lo apoyan
Un elenco de figuras estadunidenses e internacionales se han expresado a favor de la liberación de Peltier, entre ellos esta:
El papa Francisco, Nelson Mandela, Mary Robinson, el arzobispo Desmond Tutu, el reverendo Jesse Jackson, Robert Redford, Gloria Steinem, y Michael Moore, entre otros.
Se han multiplicado los llamados para la liberación de Peltier impulsadas por el Congreso Nacional de Indígenas Americanos, líderes y legisladores estatales federales, entre ellos Raul Grijalva, Jesus Chuy Garcia, Pramila Jayapal, y el senador con mayor antigüedad Patrick Leahy.
Según sus abogados, los encargados de su caso en Amnistía Internacional, en varias ocasiones se pensaba que lograrían convencer a un presidente a conmutar la condena.
Pues, se ilusionaron con esa posibilidad con Bill Clinton, y mucho después con Barack Obama, y hasta con Donald Trump, sólo para ser decepcionados; nunca les dieron una razón.
Se sospecha que la traba hasta hoy es la FBI, porque el caso tiene que ver con dos de sus agentes, y que implicaría problemas con el caso desde que se empezó el caso.
El abogado de Peltier, Kevin Sharpe, es un ex juez federal quien al enterarse del caso, se enfureció por el manejo del caso por las autoridades que decidió representarlo desde hace tres años.
En entrevista con HuffPost el año pasado, Sharpe informó que entre los documentos, descubrieron que hay un memorando interno de la FBI de los años 70.
Donde se detallaba la estrategia de suprimir al movimiento de derechos civiles indígenas AIM, del cual Peltier era integrante, incluyendo hostigamientos y arrestos constantes.
“Parte de lo que estaba ocurriendo era una política de exterminación. Estamos tomando tus tierras, tus minerales y nos vamos a deshacer completamente de ustedes… eso es lo que detonó todo” en este caso.
Sharpe dijo que es hora de que el presidente asegure que Peltier salga, y que “su condena no se vuelva en una condena de muerte”.
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