El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), desarrolló el sistema informático “Applacovid“. Se trata de una aplicación móvil y una red de tecnología bluetooth que identifica las zonas de riesgo dentro de una comunidad. Y alerta al usuario de un posible contacto con una persona diagnosticada con Covid-19.
“En la nueva normalidad es inevitable la interacción con pacientes asintomáticos portadores de Covid-19. Ya sea en el trabajo, escuela, campus universitarios u hospitales. Por lo tanto, es necesario contar con herramientas tecnológicas que notifiquen a los usuarios de la app y autoridades, de posibles portadores del virus”. Menciona Cuauhtémoc Mancillas López, participante de la iniciativa.
Ante este escenario donde los especialistas sugieren adaptarnos, buscar herramientas eficientes para su detección se hace indispensable. Por ello que el grupo de investigación de criptografía y seguridad informática del Cinvestav se enfocó en ofrecer una solución práctica y eficiente para rastrear los contagios. Con el fin de romper la cadena de contagios y contener la propagación de la infección, detectar zonas de riesgo y acercamiento con personas diagnosticadas.
El objetivo de esta app, es buscar demostrar que la tecnología cotidiana se use más allá del entretenimiento. Porque también puede contribuir a encontrar soluciones a los problemas de las personas.
De acuerdo con el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), en México existen 86.5 millones de teléfonos celulares. Tomando en cuenta ese dato, se pensó en un proyecto donde la comunidad y el uso de su celular fuera parte fundamental para el éxito de la aplicación.
Funcionamiento de Applacovid
Applacovid detecta otros teléfonos cercanos que instalaron la app e intercambian mensajes anónimos. Para registrar los encuentros que podrían representar un riesgo de contagio, en caso de que la persona localizada sea diagnosticada con Covid-19.
Cuando dos personas se encuentran, el riesgo de contacto depende de la cercanía espacial entre ellas y la duración del encuentro. Al identificar un caso positivo de covid-19 la información se sube a la app, de lo contrario se queda en los teléfonos.
“No se guardan datos de los usuarios o la ubicación de los dispositivos. Los detalles de las trayectorias se guardan cuando las personas positivas a Covid-19, de manera voluntaria, se registran en el sistema y se mandan a los servidores”.
señaló Ovilla Martínez.
Si una persona con la que se tuvo contacto recientemente es diagnosticada positiva a Covid-19 y se reporta, la app manda una alerta al teléfono, sin revelar la identidad de ambos usuarios. Con lo cual, el usuario puede extremar precauciones sanitarias, reduciendo la interacción con otras personas y vigilando su estado de salud para identificar síntomas a tiempo.
El proyecto es impulsado por la Asociación Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo, y se encuentra instalado en el Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca. Con el plan de incorporarse en cinco nosocomios más: 20 de Noviembre, del ISSSTE; Juárez de México, Civil de Guadalajara, uno de Monterrey y otro de Mérida.
Además forma parte de una iniciativa interdisciplinaria más amplia que busca desarrollar tecnología útil en la identificación de nuevas estrategias para la contención de la pandemia.
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