Aproximadamente el 70 por ciento de las víctimas de fraudes en cajeros son adultos mayores
Adultos mayores de 60 años de edad son las principales víctimas de engaños y fraudes en cajeros automáticos, aprovechando los delincuentes que sus niveles de atención son menores a los del resto de la población y que muchos desconocen el funcionamiento total o parcial de dichos aparatos.
Entre los métodos usados para defraudar e incluso obtener datos personales de las víctimas, está acercarse para supuestamente ayudarles a usar el cajero automático.
En ese momento les cambian el plástico y con los números de identificación personal disponen del dinero posteriormente.
En algunos casos los delincuentes les preguntan datos a los dueños originales de las tarjetas con lo que posteriormente obtienen otras sumas de dinero, incluso servicios en cargo.
Otro método usado es vigilar los movimientos del adulto mayor, que al salir del cajero automático es interceptado por el delincuente.
Quien le pide supuesta “ayuda” para cobrar un cheque en el banco en cuestión. A cambio les piden que dejen dinero o algún objeto de valor como garantía de que regresará.
La víctima acepta, acude a cobrar el cheque y en la caja le confirman que no tiene valor o es falso.
Al salir a buscar a la persona que le dio el documento bancario, ya no la encuentran, perdiendo obviamente sus bienes o dinero.
De acuerdo a autoridades en materia de seguridad pública, aproximadamente 70 por ciento de las víctimas de este tipo de delitos son las personas mayores de 60 años de edad, por las cuestiones señaladas.
Por ello es permanente la campaña de orientación para evitar este tipo de situaciones; en caso de que sea necesaria la disposición de grandes cantidades de efectivo, existe el servicio de acompañamiento policiaco.
Las autoridades policiacas piden a los usuarios de los servicios bancarios y en particular a los adultos mayores.
Que sólo se solicite el apoyo de los empleados de las propias instituciones financieras y nunca aceptar el apoyo de otra persona.
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