Siendo los Pueblos Mágicos la apuesta turística para fortalecer al sector a nivel nacional, Hidalgo cuenta con siete verdaderas joyas que enamoran a cualquier visitante que los visita y se sumerge en su riqueza.
Huasca, Real del Monte, Mineral del Chico y Huichapan son cuatro de los siete municipios hidalguenses que cuentan con esta denominación.
Sin embargo, hay tres que, a pesar de su riqueza histórica, natural y arquitectónica son los menos visitados, algunos por su lejanía, y otros más porque son pocos conocidos.
Tecozautla
Este pueblo mágico desde 2015, es un paraíso natural que está sumergido dentro de mesetas y fallas geológicas, así como domos volcánicos.
Pero su ambiente es adentrarse a la época colonial, con estrechas calles que desembocan a la plaza principal, en donde su reloj municipal, es una de las características que impresionan.
Así también, cuenta con el Geiser, que es uno de los respiradores del volcán Hualtepec; con aguas termales de 95 grados centígrados que ofrecen beneficios a la salud.
Cuenta con 15 balnearios de aguas termales con servicio integral de hospedaje y alimentación.
Cuenta con una zona arqueológica llamada “El Pañhú”.
Se ubica a una hora de San Juan del Río, a una hora y 40 minutos de Querétaro, a dos horas y media de Pachuca o San Miguel de Allende y a tres horas y media de la CDMX.
Zimapán
Ubicado al pie de la Sierra Gorda, es un pueblo mágico que ofrece gran variedad de paisajes y actividades como vuelo en parapente, así como diversos deportes extremos.
El atractivo principal de este hermoso lugar es su espectacular monolito de 15 metros de alto llamado “El Vigilante”, que muestra dos perfiles perfectamente formados de manera natural.
Este hermoso lugar igual cuenta con una imponente presa, que es el embalse de agua más grande del centro del país.
Otro atractivo de este lugar es un Spa de 5 estrellas, reconocido como el mejor de Latinoamérica.
Se ubica a dos horas de San Juan del Río, dos horas y media de Pachuca o Querétaro y a poco más de tres horas de San Miguel de Allende y CDMX.
Zempoala
Este es un lugar histórico que abraza al Acueducto del Padre Tembleque, sitio declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.
Es un lugar donde la historia, las creencias y las tradiciones son descritas como mágicas, la localidad es la zona donde los teotihuacanos, toltecas y chichimecas plasmaron sus huellas en una tierra bondadosa.
También está la Hacienda de Santa María Tecajete, donde se observa la producción del pulque y puede realizarse la cata de la bebida.
Aunado a lo anterior para los amantes de la fiesta brava como una expresión del arte y la cultura, en las Haciendas ganaderas de Cieneguilla y Montecristo, se realizan visitas guiadas para ver a los toros de lidia.
Está ubicado a 26.3 kilómetros de Pachuca y el trayecto entre estas dos localidades es de aproximadamente 30 minutos por la carretera México 88.
La ruta desde la CDMX hasta Zempoala, en automóvil es de 107 km, con un tiempo estimado de una hora con 46 minutos.
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